Ayer quería hacer una receta de aprovechamiento, de ingredientes que tenemos en casa y no sabemos que hacer con ellos. Abrí la nevera y tenía un bote de leche condensada abierto, que ya se tenía que utilizar y en la despensa tenía pan de molde que ya se había quedado un poco duro. Así que hice un experimento, que finalmente salió muy bueno.
Ingredientes:
4 - 5 rebanadas de pan de molde sin corteza que se haya quedado un poco duro, unos 150gr. de leche condensada, 1 vasito de leche de soja, 2 huevos eco, 1 tarrina grande de queso fresco o 4 de las pequeñas, una pizca de sal, 2 plátanos, sirope o mermelada de fresa.
Procedimiento:
En un bol ponemos el pan de molde cortado a trozos y lo bañamos con la leche de soja. Dejamos que se empape con la leche y lo deshacemos con un tenedor. Añadimos los huevos, la leche condensada (si se quiere muy dulce añadir más cantidad o un poco de azúcar moreno) y añadimos la tarrina de queso fresco. Lo mezclamos todo bien, debe quedar una mezcla bien homogénea, con grumitos pero con los ingredientes bien integrados. Si se quiere una masa mas fina, pasar un poco la batidora.
Añadimos la mezcla en unos moldes individuales, yo utilicé unos moldes de silicona redondos.
Precalentamos el horno. Horneamos unos 15 minutos a 175º, deben quedar dorados por arriba.
Dejamos enfriar, desmoldamos. Cortamos los plátanos en rodajas y las ponemos encima de las pastelitos, por último le añadimos un poco de mermelada de fresa por encima.
Que buena pinta tiene, son como florecillas pero para comer, muy ricas!!!
ResponderEliminarBesines